RUTA CORONAVIRUS
Lugar: La Cumbre (casa)
Fecha: 30 marzo 2020
Componentes: Andarines (virtual).
Distancia: flexible.
Tiempo: agradable.
Equipo: de estar en casa.
Dificultad: soledad.
Recorrido: espiral. Dormitorio,
cocina, servicio, patio y doble.
Esta es la ruta que más tiempo me
ha llevado programar por la cantidad de horas en blanco que todos estamos
obligados a cumplir.
Llevo días analizando la
orografía del terreno, la incidencia de los rayos del sol, la dirección del
viento y la distancia del recorrido contando los baldosines. He realizado las
mediciones y cálculos pertinentes para dibujar un circuito con todas esas
variables reflejadas. Me ha quedado chulo, con colores de hace años, cuando mis
hijos coloreaban la realidad y el futuro.
La hora elegida ha sido la más
apropiada para no interrumpir a los demás miembros de la familia en sus tareas
diarias.
He decidido realizar la ruta el
lunes porque nunca lo había hecho, para romper la monotonía y comenzar la
semana con más alegría.
El comienzo del recorrido es la
mesilla porque allí tengo cargando el móvil que curioseaba cada vez que volvía,
resolviendo incluso alguna actividad laboral por el WhatsApp, todo un lujo.
El paisaje es blanco en las
alturas, de colores uniformes a los lados,sencillo. El horizonte está cerca, el
aroma es agradable, se desprende de la cocina, de un guiso de siempre. La vista
también se recrea con los postres típicos de las fechas cercanas y todo ello
hace que el recorrido sea ameno para los sentidos.
Aparece el sol en el patio cuando
las nubes se alejan y dejan pasar los rayos tan deseados. También la brisa del
aire baja entre paredes para hacerlo más respirable.
Seguimos el recorrido por las
escaleras hasta llegar al doblado, donde por la ventana se hace más largo el
horizonte, se divisa la soledad de la calle y los pájaros en todas partes
porque nadie los espante. Algunos aullidos de perros a lo lejos suenan
diferentes. Seguro que ellos saben que algo ha cambiado, como nosotros, no
pueden verlo. Aprovecho para hacer un pequeño reportaje fotográfico.
He perdido la cuenta de las veces
que he llegado hasta la mesilla porque alguien de mi familia me ha llamado para
preguntarme algo que resolví sobre la marcha. No importa, el paisaje se repite
con todos sus detalles.
Al pasar por la cocina tomaba
agua para refrescarme. No he mirado el reloj, llevo un rato, ahora el tiempo
tiene otra dimensión diferente. Me siento bien y recuerdo que dejé unas
cervezas en la nevera. Cojo una, un trozo de pan, patatera, sigo hasta el
patio. Me siento, brindo por la salud de todos y disfruto de ese manjar tan
nuestro.
Se acabó la jornada. Ha sido, una vez más, un
placer compartir el pensamiento con todos los Andarines y desear que pronto
volvamos a realizar una ruta real.
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TEJAS Y CIELO |
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PAJAROS |
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DESDE UNA VENTANA |
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DESDE OTRA VENTAN |
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DESDE EL BALCON |
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AL OTRO LADO DEL BALCON |
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DE FRENTE, PAJAROS |
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SOMBRAS |